Todo indica, según los modelos de la NOAA, que El Niño volvería a mediados de año. De ser así, 2023 sería un año más seco.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés) prevé «un potencial retorno» del fenómeno de El Niño entre mayo y julio próximos, aunque advierte que aún hay «incertidumbre» sobre este escenario.
En un reciente informe sobre el estatus actual y predicciones del fenómeno El Niño-Oscilación del Sur (ENOS, en inglés), la NOAA pronostica una transición de La Niña a ENOS neutral entre febrero y abril. «De febrero a abril de 2023, la mayoría de modelos indican el retorno del ENOS neutral», dice el documento. Sin embargo, «los modelos dinámicos sugieren un potencial retorno de El Niño» entre mayo y julio», agrega el informe.
La Niña ocurre cuando la temperatura del Océano Pacífico se reduce y provoca más lluvias de lo habitual. El Niño es lo contrario: las aguas aumentan de temperatura y reduce las lluvias.
En su blog dedicado al ENOS, la NOAA dijo el 8 de febrero que hay 85 % de probabilidad de que ocurra una transición de La Niña a neutro. El retorno de El Niño tiene un 85 % de probabilidad, aunque todavía hay reservas sobre esta previsión.
«Los pronósticos hechos en la primavera tienden a ser menos precisos, al menos en parte porque la primavera es un momento de transición para el ENOS (…), lo que dificulta que los modelos comprendan en qué dirección van las cosas. Además, la amplia gama de resultados potenciales de los modelos nos dice que todavía hay mucha incertidumbre», explica la agencia. En el documento publicado el 13 de febrero, la NOAA indicó que los modelos estadísticos, a diferencia de los dinámicos, apuntan a que el ENOS neutral continuará en el hemisferio norte durante el verano.
El martes el titular del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Fernando López, no descartó la aparición de El Niño este año, aunque también hizo eco de la incertidumbre del NOAA. «Se prevé también una canícula moderada a mediados de año y una transición hacia el fenómeno de El Niño (…). Sí, puede afectar directamente (El Niño), (pero) nosotros vamos a estar informando ya en marzo y en abril de una perspectiva con más números, con más datos», dijo en una entrevista de televisión.
En otros países de Centroamérica también se espera un año más seco. «En los últimos años abril no ha sido tan seco, pero este año esperamos que va a llover poco comparado con los últimos dos años», dijo el jefe del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (CENAOS) de Honduras, Francisco Argeñal, al periódico La Prensa.
Mientras tanto, el Servicio Meteorológico de Guatemala (SMG) ha confirmado que actualmente las temperaturas del Océano Pacífico están por debajo de lo normal, que es una característica de La Niña, y al igual que el NOAA prevé que dichas condiciones se mantengan por lo menos hasta abril.