Gustavo Rosell, viceministro de Salud Pública, aseguró que existe la posibilidad de hallazgo de una variante peruana del COVID-19, luego de que un grupo de médicos de la Universidad Cayetano Heredia publicara un estudio en una revista científica internacional sobre el hallazgo de una variante parecida a la brasileña que circula en nuestro país y que podría ser considerada una variante propia.
«Esto nos sirve para que nuestro sistema de vigilancia haga la constatación pertinente y las alertas que corresponden porque tenemos cuáles son las características de esta variante, pero hay muchas variantes, las más conocidas son las que tenemos identificadas, pero sería una posibilidad también que ya haya una variante propia en el país”, indicó.
Rosell aseguró que este estudio pone en alerta al Ministerio de Salud para que el Instituto Nacional de Salud realice los estudios respectivos. Hasta el momento en el país se han estudiado las variantes británica, sudafricana y brasileña.
MÁS INFORMACIÓN SOBRE LA NUEVA VARIANTE (C.37)
Según los investigadores de la Universidad Cayetano Heredia, C.37 está circulando en Perú y Chile desde diciembre del 2020. Esta variante tiene mutaciones en la proteína spike parecidas a las de B.1.1.7 (identificada inicialmente en Reino Unido), B.1.351 (reportada en Sudáfrica) y P.1 (identificada en Manaos), que en este momento constituyen uno de los principales peligros para encarar la crisis global.
“La C.37 desciende de un linaje llamado B.1.1.1 que circula por todo el mundo desde inicios de la pandemia. En 2021, esta nueva variante se expande rápidamente y ahora la vemos en 50 de 123 (40,6%) genomas reportados en Lima y Callao entre enero y marzo”, explica a OjoPúblico el investigador Pablo Tsukayama, que impulsa un proyecto de vigilancia genómica del SARS-CoV-2 desde que inició la pandemia.
Lo que le preocupa al científico son las mutaciones que presenta C.37 y que «podrían ayudarle a evadir la neutralización por anticuerpos».
En tanto, el gobierno de Ecuador reportó el 24 de abril cinco casos de la variante C.37 en las provincias de Oro y Pichincha. Además, de otras dos que circulan en su territorio: P.1 y B.1.1.7. “El Ministerio de Salud Pública continúa fortaleciendo la vigilancia de la Covi-19 que permita contar con la evidencia suficiente para evaluar la transmisibilidad, gravedad, riego de reinfección y establecer el impacto de estas variantes”, señala el comunicado oficial.